Xalapa, Ver.- “La ganadería tradicional causa más problemas que beneficios, por lo que es necesario transitar a una alternativa que conserve los recursos naturales y favorezca la equidad de ganancias entre los productores”, planteó Bernardo Sánchez Muñoz, experto nacional en ganadería orgánica, en plática ofrecida a la comunidad de la Facultad de Ciencias Agrícolas de la Universidad Veracruzana (UV). Su participación se dio en el marco del proyecto 321317 “Fortalecimiento de los sistemas de verificación agroecológica orgánica de las redes agroalimentarias y alternativas como mecanismo para avanzar hacia la soberanía alimentaria en México”, impulsado por la facultad y financiado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt). Al hablar sobre la transición hacia una ganadería orgánica, el profesor jubilado de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Autónoma de Chiapas, puntualizó que esta práctica integra sistemas de producción animal basados en el pastoreo, conserva el entorno ambiental y la biodiversidad, evita el uso de sustancias químicas y ofrece a los consumidores alimentos de gran calidad organoléptica, nutritiva e higiénico-sanitaria. Afirmó que la ganadería orgánica es una alternativa que contribuye en forma importante a la solución de problemas mundiales como el cambio climático, la pobreza, el hambre, la seguridad alimentaria, la migración, el desempleo y el subdesarrollo. Considera un manejo integral, en el que la alimentación y el abono son producidos en la misma unidad donde crecen los animales; a su vez, incluye rotaciones diversas que conservan la fertilidad de los suelos y brindan protecciones preventivas a los cultivos.
Además, el uso de insumos químicos para la eliminación de malezas de las praderas y la ivermectina están prohibidos, ya que dañan a insectos benéficos como el escarabajo estercolero. Bernardo Sánchez explicó que para transitar hacia una ganadería orgánica con pequeños productores, es necesario realizar un diagnóstico para determinar el grado de aproximación de la unidad de producción ganadera al estándar orgánico, a fin de identificar los puntos que se tienen que corregir. También se debe elaborar un plan de manejo de explotación acorde a la normativa, que implemente bitácoras y registros que documenten las actividades llevadas a cabo. El asesor agropecuario enfatizó que la supervivencia de la ganadería orgánica depende de la demanda de quienes adquieren los productos que derivan de ella, que están conscientes de agregar en su alimentación valores como la biodiversidad, la preservación de especies, la protección de la naturaleza, pero sobre todo del consumo de comida sana y de calidad.